01 de agosto de 2015
La
jornada del día se inició con la muy significativa lectura “Siempre se hace así”
extraída del libro La culpa es de la vaca y los presentes expresamos nuestra opinión
sobre las interrogantes formuladas:
¿Con
que frecuencia nos preguntamos si “éste será el mejor modo de hacer esto?
¿Los
planificadores son realmente innovadores o siguen los mismos caminos?
Considerando
que ante cualquier escenario, nos acostumbramos a realizar las mismas actividades,
siguiendo las mismas reglas y en un
mismo orden… los docentes como planificadores por excelencia debemos explorar y aplicar siempre distintas opciones
que posibiliten y mejoren los resultados obtenidos en las viejas prácticas. Sencillamente,
se trata de darnos la oportunidad de probar nuevas opciones que seguramente nos
brindaran el camino más provechoso hacia el éxito.
Muy
atentos ante las reflexiones suscitadas, recibimos la visita del Profesor
Francisco Viloria que de una forma natural, sencilla y amena nos habló sobre el
lenguaje, la lengua, el habla, las variaciones lingüísticas, la ontología del
lenguaje, entre otros aspectos; y durante su intervención nos recordó que “la
lengua que manejamos no es autóctona, ha sido adquirida por diversas
transformaciones históricas”. De ahí la importancia de revisarnos, de revisar
nuestra formas de expresión, las palabras, dichos, refranes, las construcciones
especiales de algunas frases como propias de algún espacio geográfico, de una época
o un nivel de conocimiento en especìfico. En el mismo orden, nos propuso
responder: ¿Qué es el lenguaje? ¿Cómo se construye el lenguaje? ¿Para qué nos
sirve el lenguaje?
- El lenguaje es un Don que nos distingue de las otras especies.
- Es la herramienta o medio que nos permite relacionarnos e interactuar con nuestro entorno y con nuestra realidad.
- El lenguaje contiene la experiencia de los pueblos y la transmite.
En consecuencia, resulta indispensable
reconocer, valorar y respetar la lengua natural, esa que contiene toda la información
de lo que fuimos y de lo que somos.
Si en un
aula de clases o en cualquier otro espacio se nos presenta una situación donde
el estudiante manifiesta su propio modo de expresión (ese que ha adquirido por
herencia cultural) no podemos abruptamente menospreciarlo e impedir que lo haga,
debemos darle a conocer a él y a sus compañeros de clases que existen otras
expresiones por explorar que podemos tomar para enriquecer nuestra lengua y que
apartemos todas aquellas vulgaridades que contribuyen al irrespeto.
"La sociedad no sòlo existe por la comunicaciòn sino que existe en ella. De esta manera la comunicaciòn es dialèctica y reconstruye la experiencia" John Dewey.
"La sociedad no sòlo existe por la comunicaciòn sino que existe en ella. De esta manera la comunicaciòn es dialèctica y reconstruye la experiencia" John Dewey.
No hay comentarios:
Publicar un comentario